Nueva visión de la neurorrehabilitación, basada en las terapias que cuenta con mayor respaldo científico, un espacio innovador que fusiona tecnología y entrenamiento, y donde el paciente tiene el papel protagonista durante el proceso de su recuperación.
Sigue las fases del proceso rehabilitador, comenzando por una valoración exhaustiva con el planteamiento de objetivos centrados en la persona, hasta alcanzar el seguimiento posterior, fase donde se da continuidad a los logros conseguidos.
Lo primero que debemos entender para poder responder a esta pregunta, es poner en contexto el cuanto, en el ámbito de la neurorrehabilitación es a través del establecimiento de una serie de objetivos o metas que motiven y tengan significado para la persona afectada, por lo tanto la cantidad de mejoría se verá reflejada en la consecución o no de los objetivos. Con respecto al tiempo, podríamos contextualizar de la misma manera, es decir, período que se tarda en alcanzar las metas propuestas. En este sentido, las últimas publicaciones científicas están demostrando que existen mayores cambios significativos en períodos más cortos de tiempo (2, 3, 4 semanas) pero con un mayor número de horas por día (más concentrado). Esto permite alcanzar una dosis de terapia más adecuada (elevado número de repeticiones, mayor variabilidad, etc.) además de incrementar la exigencia durante la terapia (realización de actividades que desafíen verdaderamente a la persona). En conclusión, se consiguen mejoras más significativas y de manera más rápida que con la terapia convencional.
Toda persona que presente algún tipo de afectación neurológica y quiera alcanzar algún objetivo específico, mejorar sus capacidades actuales, aumentar su autonomía o evitar complicaciones futuras. Todos son candidatos a desarrollar un protocolo de tratamiento indistintamente de edad, severidad de lesión o cronicidad de la misma. (Para mayor información visita las pestañas de quien)
El proceso de rehabilitación esta formado por diferentes fases que van desde la valoración inicial, hasta el seguimiento posterior una vez finalizado el tratamiento. Respecto a los métodos, técnicas y medios que utilizamos, dependerán del estado inicial de la persona y los objetivos que se quieran alcanzar. No hay 2 procesos iguales ya que no hay 2 personas iguales (Para mayor información visita las pestañas de Cómo y Medios).
El lugar donde se realiza el proceso rehabilitador es una combinación entre nuestras instalaciones (situadas en la bahía de Santander) y la propia ciudad, ejemplo perfecto de enriquecimiento ambiental, ofreciéndonos entornos tan variados como la playa o montaña. Somos defensores acérrimos del trabajo en entornos reales, ya que es la única manera de transferir lo aprendido en el “laboratorio” (Para mayor información visita las pestañas de Dónde).
No existe una única respuesta a esta pregunta, ya que dependerá principalmente del estado actual de la persona y de los objetivos planteados entre esta, la familia y el equipo terapéutico. Pero lo que sí sabemos con seguridad, es que el proceso debe tener un principio y un final. Se debe tener precaución con los protocolos de tratamiento que se realizan en muchos centros, los cuales son alargados demasiado en el tiempo (llegando incluso a durar años); Hasta en procesos de rehabilitación de patologías neurodegenerativas se puede y se debe concretar un determinado tiempo de terapia, ya que es la única manera de comprobar si realmente ha tenido éxito o no la intervención.
La realidad es que no conseguir adquirir unas mejoras que se transfieran a situaciones funcionales, puede causar una perdida gradual de las capacidades alcanzadas. Por ello, nos esforzamos al máximo en que la persona automatice e integre los cambios logrados, mediante la intensidad, la repetición y la motivación. Incidimos en la instauración de hábitos rutinarios como la practica diaria de actividades funcionales y la actividad física que permitan mantener e incluso mejorar las habilidades aprendidas durante el proceso rehabilitador.
“Cuando conocimos a la fisioterapeuta Maria Tovar, para nosotros fue como un rayo de luz en las tinieblas de la enfermedad de Carmen, luego a lo largo del tratamiento descubrimos otras de sus virtudes que la hacen ser una gran fisio, su desbordante humanidad, su forma tan cariñosa de tratar a los pacientes, y sin embargo no carente de autoridad, energía y actitud para la terapia además de su profesionalidad, su enorme profesionalidad”